20081111

“Final de juego” de kirchneristas con Juez

Los últimos pasos del ex intendente, que se encamina a una alianza con Carrió, espantan a los sectores afines a los K. Algunos ya admiten que la era Juez terminó para el kirchnerismo y piensan en altenativas para afrontar 2009 y 2011



Los sectores kirchneristas cercanos a Luis Juez no logran digerir los últimos pasos del ex intendente, y algunos de sus representantes aseguran que llegó el momento del dar “over game” al vínculo con el jefe opositor.Consideran que las recientes reuniones del ex jefe comunal con la jefa de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, no son sólo un ejercicio de fotopolítica sino el comienzo de una alianza electoral y política para las próximas elecciones. Y para muchos, Carrió, como José Manuel de la Sota en el peronismo, son “el límite”.La alianza, si sale como Juez pretende (y necesita) avanzaría también hacia la UCR y el socialismo, aunque hasta el momento han sido infructuosos los intentos de acercamiento entre Carrió y el gobenador de Santa Fe, Hermes Binner. Con ese objetivo viaja el 24 Juez a la vecina provincia.No sólo es Lilita: muchos dirigentes K aseguran que no se explican como el ex jefe comunal, que suele definirse como “estatista” en relación a cuestiones municipales o provinciales, rechace de plano la nacionalización de los fondos de capitalización que manejan las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones.Sin Juez, el kirchnerismo mira al intendente Daniel Giacomino, la gran esperanza blanca. La promesa que recibió el jefe municipal es que va a tener todo el apoyo del gobierno de Cristina Fernández, que estará muy “líquido” luego del traspaso de los fondos jubilatorios a la ANSeS. Y eso significaría apoyo financiero para el soldado mediterráneo. «Sin gestión no hay candidato», recitan en Buenos Aires.La diputada nacional Patricia Vaca Narvaja es una de las “de- silusionadas” con lo que considera “un giro al centro derecha” de parte de Juez. El viernes pasado estuvo en Córdoba, donde junto a los legisladores Enrique Asbert, Silvia Rivero y a la titular de la ANSeS Córdoba, Mónica Gutiérrez, se dedicó a explicar la ley de estatización previsional, a pocas horas de que el oficialismo lograra una cómoda media sanción.La “bajada” de la vicepresidenta de la Cámara baja incluyó frases que hubieran sido de alto impacto si el kirchnerismo conservara algo del poder de fuego de otrora: dijo que Juez y De la Sota están alineados ideológicamente, lo cual se nota, aseguró, en sus posiciones sobre el tema retenciones móviles y en la permanencia de los fondos jubilatorios en las AFJP.A Juez, nada de eso le preocupa. Un funcionario nacional que lo respeta le reprochó que «no puede armar la agenda del progresismo por oposicion al gobierno», a lo cual el ex intendente respondió: «Yo soy un dirigente opositor».Pese al liderazgo de Juez, hay debate en el Frente Cívico ala K. De hecho, la posición ante los cambios previsonales nacionales provocó el malestar de los sectores gremiales alineados en el juecismo, partidarios históricamente del sistema de reparto.“Me parece bien que corten con la ilusión de Juez. Es como cuando un novio te dice que no te quiere más, pero vos igual te aferrás a esa relación. Claro, se trata de un novio que es un muy buen partido”, ironizó otra dirigente K.Cuantitativamente es poco lo que hay en el espacio K fuera de Juez. “Está Daniel (Giacomino), está Libres del Sur, está (Alberto) Cantero, están el Partido Intransigente y el Frente Grande, está Patricia Vaca Narvaja y el bloque Concertación Plural”, enumeró un funcionario cordobés que responde al gobierno nacional. En su lista, incluyó un grupo de intendentes y jefes comunales, entre los que figura el coscoíno Marcelo Villanueva (PJ).En este listado, el caso de Libres del Sur es particular. En pleno proceso de alejamiento de los Kirchner, el partido apoyó la reforma jubilatoria, pero ha decidido mantener un perfil bajo en relación a las diferencias con Juez, al que siguen considerando su referente contra el bipartidismo.Por otra parte, en el giacominismo la situación dista de ser un lecho de rosas. Con voz más o menos alta, las agrupaciones K que integran la corriente Convergencia en el Frente Cívico se quejan de la «radicalización» del espacio, y algunos ya hablan de «desmembramiento».


fuentes: La mañana de cordoba